Blue Velvet es una película del director norteamericano David Lynch, quien es reconocido por hacer cine de tono bastante perturbador. Quienes esten familiarizados con la filmografía de este director ya sabrán que pueden esperar de esta obra, para todos aquellos que desconozcan su trabajo es necesario que sepan que esta no es una película fácil de digerir, es escalofriante, un verdadero terror psicológico.
La película gira entorno a Jeffrey Beaumont, quien llega al pueblo de Lumbertown tras enterarse de que su padre ha sufrido un accidente, involuntariamente se verá inmerso en un misterio que involucra un secuestro, un asesinato, violación y sadismo. Será trabajo de Jeffrey descubrir los motivos de la relación entre una cantante llamada Dorothy Vallens y el violento Frank Booth (Interpretado por Dennis Hopper).
Estamos ante una obra con una historia cruda y desagradable, pero artísticamente perfecta, las actuaciones son remarcables sobre todo la de Dennis Hopper, quien interpreta a uno de los personajes mas riesgosos y desquiciados en la historia del cine, esta clase de papeles pueden ponerle fin a la carrera de cualquier actor, Sin embargo Hopper lo hace de una forma magnífica, el nivel de locura de su personaje llega a tal grado que es imposible no reconocerlo como uno de los mayores antagonistas del cine.
El mensaje de Lynch en esta película es bastante claro, el mundo bajo su manto de perfección, es un lugar oscuro y violento, la superficialidad del mundo exterior no es nada más que una cubierta para el abismo negro que oculta la sociedad. La primer escena lo demuestra a la perfección, en un bello jardín lleno de flores y pasto verde se esconden los insectos,bajo tierra, sucios, sin un propósito más que el de destruir la belleza que los rodea.
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